El Cajasol prosigue con el pleno de triunfos en diciembre al imponer su intensidad atrás ante un Assignia Manresa guerrero que no se rindió en ningún momento.
El Cajasol se ha impuesto este sábado al Assignia Manresa (52-48) en un trabado encuentro que se decidió por el camino de la defensa y en el que puso todo el corazón necesario para doblegar a un rival guerrero que no se rindió en ningún momento. De esta forma, el cuadro cajista pone la sexta victoria en su casillero, que ya está equilibrado (6-6), y alcanza la tercera seguida, con lo que prosigue con el pleno de triunfos en un dulce mes de diciembre y aferrado a sus esperanzas de estar en la Copa del Rey de Madrid.
Con dos equipos que defienden bastante bien y muy necesitados, el uno por seguir la estela de los ocho primeros y el otro por salir de los puestos delicados de la clasificación, estaba claro que el partido se iba a decidir por la defensa y el Cajasol lo entendió a la perfección, pareciéndose mucho al que la pasada campaña asombró en la ACB. Dejó al Assignia Manresa cerca del peor registro ofensivo de la temporada (44), provocando 20 pérdidas, llegando a las 14 recuperaciones y dominando el rebote (33-25).
A partir de esa receta, el Cajasol cocinó el partido que mejor venía ante un rival poco acertado en ataque pero que mordía en defensa. Por eso perdió importancia la falta de acierto en los triples (12% con 2/17) y en los tiros libres (63% con 10/16). Mucha más, por el contrario, tuvo la capacidad de dejar al Assignia Manresa en un 30% en tiros de dos (9/30). Los hombres de Plaza complicaron mucho las cosas a su rival para construir el juego de ataque, con presión a toda la cancha y tapando mucho los espacios. Si no fuera por el acierto en los triples (44% en 7/16), los manresanos podrían haber salido de San Pablo con una anotación histórica.
Y todo ello pese al hándicap de apenas poder contar con Paul Davis, que a los cuatro minutos de juego ya acumulaba tres personales y luego cometería otras dos nada más volver a la cancha en el tercer cuarto. Ello permitió al Assignia Manresa aprovechar los puntos de Uros Slokar para tomar las primeras ventajas (4-8), aunque seis puntos de Kirksay hicieron que el Cajasol se fuera a la primera pausa con ventaja (12-11).
La última canasta, anotada por Popovic, abrió un parcial de 9-0 que se completaría ya en el segundo cuarto y que se incluía en otro mayor de 15-3. Con Bullock muy enchufado y Triguero haciendo que no se notara la ausencia de Davis, el Cajasol abrió una primera brecha al descanso (26-17) de un partido rácano en anotación.
Tras el paso por los vestuarios, el joven base manresano San Miguel se echó su equipo a la espalda para liderar un acercamiento (34-29), pero los locales se apretaron en defensa justo cuando llegaba la quinta de Davis. Un parcial de 8-0 al final del tercer parcial parecía dejar el partido casi sentenciado (42-29). No obstante, el Assignia Manresa no se rindió y, fiado su ataque a los triples, consiguió ponerse a cinco puntos a falta de tres minutos (48-43). Al Cajasol le costaba anotar, pero una penetración de Kirksay y una canasta de Bullock impidieron que el Assignia Manresa pudiera remontar y dejaron en Sevilla un sexto triunfo que refrenda la progresión del equipo.
Cajasol (52): Satoransky (6), Kirksay (10), Bullock (15), Davis (1), Ivanov (5) -cinco inicial-, Popovic (2), Triguero (6), Cabanas (0), Pampano (-), Urtasun (5), Katelynas (0), Sastre (2).
Assignia Manresa (48): Hernández (0), Grimau (10), Llorca (6), Slokar (6), Majstorovic (6) -cinco inicial-, Montañez (7), Alzamora (2), López (-), Gladyr (0), Lewis (2), Oriola (-), San Miguel (9).
Parciales: 12-11, 14-6, 16-12 y 10-19.
Árbitros: Conde, Araña y Sacristán. Eliminaron por cinco faltas personales al pívot del Cajasol Paul Davis (m. 25) y al del Assignia Manresa Uros Slokar (m. 40).
Incidencias: partido correspondiente a la duodécima jornada de Liga en la ACB, disputado en el pabellón San Pablo de Sevilla ante unos 4.500 espectadores.
Fuente: baloncestosevilla.com
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