Las tres cabezas que organizan el Real Madrid de baloncesto compartieron ayer sus reflexiones con Metro. Antonio Martín (director de la sección), Alberto Herreros (director técnico) y Joan Plaza (entrenador) hicieron balance de la temporada recién acabada y explicaron en qué están trabajando para la próxima campaña.
“Bullock, Reyes, Raül... contamos con una columna vertebral que muy pocos tienen y vamos a construir sobre ellos”, declara el técnico. También sobre Hervelle, que en pocos días tendrá confirmada su continuidad. Habrá entre dos y cinco cambios. El primero, el pívot estadounidense Jeremiah Massey. Otro será Marko Thomas, tras su cesión al Fuenlabrada. Los demás llegarán pronto. Eso sí, Plaza no quiere ni una plantilla larga ni un jugador franquicia.
En la próxima campaña, los blancos confían en dar otro paso al frente, el que les ha faltado para alzar alguno de los títulos. Su entrenador pide “seguir creciendo y poder competir como hace años”, aquellos en los que el club blanco difícilmente se iba de veraneo sin haber guardado un trofeo nuevo en sus vitrinas. “Ganar la Copa, que se jugará en Madrid sería fantástico, pero sabemos que ni ganando eso sería suficiente”, asegura Plaza, consciente de que en el Madrid las victorias se piden “para ayer”.
El 'caso Pepu'
Plaza hubiera preferido tenerlo en los Juegos
"Creo que lo mejor hubiera sido mantener a Pepu”. Joan Plaza se moja en la polémica deportiva de los últimos días. A su juicio, el que llegue tendrá un trabajo complicado, tanto para mantener el listón de los últimos años como para encarar una etapa en la que “muchos jugadores dejarán de ir con España”. Eso sí, para el puesto libre Plaza no quiere extranjeros ni ofertas. “Ojalá algún día sea seleccionador. Ahora estoy lejos de esa capacidad, pero dentro de 10 años me gustaría que me lo plantearan”, afirma.
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